Cuando un baño tiene más de 10 años, el paso del tiempo es evidente y empezamos a pensar que quizás haría falta hacer algunas mejoras. Sin embargo, la idea de embarcarnos en una reforma, con las molestias que ocasiona y el gasto que supone, no nos convence. Pero, ¿hay alguna alternativa a los fontaneros, los albañiles y la reforma en profundidad? Creemos que sí. En este artículo te vamos a proponer algunos cambios y mejoras que puedes realizar tú misma, sin necesidad de llamar a ningún experto, y con un presupuesto mucho más bajo que el de una reforma integral.
Vamos a repasar qué mejoras puedes realizar en las paredes, los sanitarios o la encimera para ponerlos al día y frenar el deterioro que provoca el uso y el paso del tiempo. La idea es lograr que tu baño parezca nuevo y con un gasto mínimo. ¿Preparada para hacerle un lavado de cara a tu baño?
1. Blanquear las juntas de los azulejos
Unos de los elementos del baño que más se deteriora con el paso de los años son las paredes. La constante exposición de los azulejos a la humedad hace que sus juntas se ennegrezcan, lo que desmejora mucho la imagen del baño. Para devolver el blanco a las juntas, lo primero es limpiarlas. Mezcla en un barreño agua caliente con amoníaco: pon una parte de amoníaco por 10 de agua. Frota entre las juntas con una esponja o con un cepillo de dientes y, cuando hayas acabado, retira los restos con una bayeta. Finalmente, seca con un paño. Si no quedan lo suficientemente limpias, aplica un blanqueador de juntas. Verás como este cambio tan sencillo mejora mucho la imagen de tu baño.
2. Eliminar el moho de las paredes
No hay mancha más molesta y que desmejore más una estancia que la aparición de moho en las paredes. La humedad acumulada, sobre todo en la parte baja de las paredes de la ducha y alrededor de la bañera, crea unas manchas negras muy antiestéticas. Una manera de eliminarlo es rascarlo con un poco de lejía disuelta en agua y una vez hayas acabado, aplica un protector antimoho para evitar que vuelva a aparecer. En el caso que el moho esté en el borde de la bañera, lo más aconsejable es retirar la silicona y aplicarla de nuevo. Encuentra aquí más información sobre cómo limpiar los azulejos del baño para eliminar el moho.
3. ¿Y si pintas los azulejos para renovarlos?
Una manera de renovar una estancia es cambiar el color de las paredes, pero en el caso del baño no solemos barajar esta opción. Pues has de saber que existe pintura especial para azulejos que te permite renovar la apariencia del baño sin necesidad de meterte en grandes reformas. Además, esta pintura te permitirá disimular el deterioro que hayan podido sufrir los azulejos con el paso del tiempo. Antes de pintar, deberás limpiar bien los azulejos y reparar con masilla los pequeños desperfectos que puedan tener las paredes. A continuación, ya puedes aplicar la pintura especial tal y como harías con cualquier otra pared.
4. Recuperar el color blanco de los sanitarios
Con el paso de los años, los sanitarios blancos pueden adquirir un tono amarillento muy desagradable. Si no quieres cambiarlos todavía, hay un truco para que recuperen su color blanco y alargar su vida unos años más. Mezcla esencia de trementina y sal, aplícala sobre los sanitarios con una esponja, deja actuar 4 minutos y enjuaga con agua caliente. Si el interior del inodoro también amarillea, vierte unos 60 mililitros de refresco de cola y deja que actúe medio día. A continuación, frota con la escobilla y aclara con agua.
5. Reparar un desconchón en la bañera
Una reparación muy sencilla que puedes hacer en el baño es arreglar los posibles desconchones de la bañera. Para ello, lo primero que debes hacer es limpiar la zona y secarla bien. A continuación, aplica con un pincel un restaurador cerámico sobre el desconchón. Déjalo secar y si ves que no se ha cubierto del todo aplica más restaurador hasta que no se note el desperfecto. Con muy poco esfuerzo, conseguirás que la bañera parezca nueva.
6. Lograr que la mampara vuelva a brillar
La cal del agua hace que la mampara de cristal de la ducha pierda su brillo. Una manera de recuperarlo es aplicar un protector líquido antical que creará una capa que repelerá la cal del agua y la suciedad. Primero limpia la mampara con vinagre blanco, un producto natural muy efectivo contra la cal. Asegúrate que la mampara está seca y a continuación aplica el protector líquido antical con un paño de algodón. Si quieres saber más sobre cómo proteger tu mampara de los efectos de la cal del agua y cómo limpiar tu mampara de la ducha sin esfuerzo, pincha aquí.
7. Arreglar un inodoro que pierde agua
Una de las averías más habituales en baños que acumulan muchos años es la pérdida de agua del inodoro. Para solucionarlo, y no seguir perjudicando el medio ambiente ni aumentando tu factura del agua, debes fijarte en dos cosas: el flotador de la cisterna y la válvula, las dos causas más habituales de los inodoros que pierden. Ambos problemas puedes arreglarlos tú misma sin necesidad de cambiar todo el sanitario. Para ajustar bien el flotador solo tienes que doblar la varilla hacia abajo. Si aun así, el inodoro continúa perdiendo agua cambia la válvula. Cierra la llave de paso del agua, saca la válvula y enrosca con cuidado la nueva.
8. Dar brillo a una encimera de madera
Las encimeras de madera crean un ambiente muy cálido en el baño pero son superficies delicadas que se pueden deteriorar con los años por su contacto con el agua y la humedad. Si quieres devolver el brillo a tu encimera de madera, aplica una capa de cera de ebanista o un esmalte al agua multisuperficie, y con efecto antimoho, que la protegerá de las agresiones del agua. Si tu encimera es de mármol y tiene algún golpe, puedes aplicar un reparador de mármol de dos componentes (polvo blanco de mármol y una resina). Si tu encimera tiene una grieta o un pequeño agujero, solo tienes que aplicar el reparador de mármol, alisarlo bien, lijarlo con una lana metálica húmeda y, finalmente, pintar con un barniz para mármol.
9. Eliminar la cal de los grifos
En lugares con aguas muy duras es normal que los grifos del baño, ya sean del lavamanos o de la ducha, acumulen cal y no funcionen tan bien como cuando eran nuevos. Sobre todo en la ducha es muy molesto, pero antes de cambiar el rociador por uno nuevo prueba a aplicar un antical que deje libres los orificios por donde sale el agua. En el caso de los grifos del lavamanos, desenrosca el aireador, sumérgelo en agua caliente con un poco de antical y verás como los depósitos de cal se disuelven en unos 10 minutos.
10. Desatascar las tuberías
¿Has notado que el agua se queda encharcada en la ducha o el lavamanos mientras los estás utilizando? Seguramente hay un atasco en las tuberías y por eso no tragan bien. Para solucionarlo no hace falta que llames a ningún fontanero. Coge un alambre y hazlo bajar por la tubería hasta donde notes la obstrucción y ya no puedas seguir bajando. En ese momento, haz girar el alambre para deshacer el tapón. Si el atasco no es tan grave, otra buena opción es recurrir a un líquido desatascador que puedes verter en la tubería y dejarlo unas horas hasta que se deshaga el tapón.